Después de haber estado eternamente a la sombra de Europa y América del Norte, el Caribe está emergiendo como una nueva potencia en el Decatlón mundial.

La primera clarinada la dio en 1992 el muy joven cubano Raúl Duany cuando se impuso, contra todo pronóstico, en el mundial juvenil de Seúl. Sus impresionantes resultados en las dos pruebas finales del programa del Decatlón, le depararon la gloria y el reconocimiento de todos en el mundillo atlético.

Pero luego su carrera pasó sin grandes triunfos, aunque llevó el tope nacional de Cuba y el de CAC hasta 8252 puntos.

En ese entonces disputaba duras batallas con su archirrival y paisano, Eugenio Balanqué. Ambos asistieron a las principales contiendas mundiales de combinadas, aunque nunca fueron protagonistas y siempre marcharon a la zaga de Europa y Norteamérica.

Pero todo en este mundo cambia y con el lógico relevo de generaciones llegaron nuevos nombres a la palestra en el Decatlón.

Encabezando el listado arribó el jamaicano Maurice Smith, quien en sus años juveniles marchaba detrás de su coequipero Claston Bernard. Pero Maurice se superó a sí mismo y su empeño y dedicación han brindado sus frutos.

Actualmente es uno de los principales contendientes al oro olímpico en Beijing, a pesar de su flojísima foja en el lanzamiento de la jabalina. Él mismo mencionó, luego de su reciente victoria en la ciudad de Kladno, cerca de Praga, en la República Checa, que si quiere convertirse en recordista mundial tiene que mejorar su performance en este evento, donde está muy lejos del nivel medio para los mejores decatletas del mundo.

La actuación de Maurice en los Mundiales de Osaka 2007, cuando finalizó segundo, detrás del famoso y destacado atleta checo Roman Sebrle, lo encumbró, pues además del metal plateado estampó nuevo registro nacional de Jamaica y también cota para Centroamérica y el Caribe con 8644 unidades.

Detrás del atlético jamaicano, marcha un grupo de cubanos muy jóvenes que están redefiniendo el evento en la mayor de las Antillas.

El más laureado de ellos es Yordanis García. Desde muy joven sorprendió al mundo con sus registros. Su primer gran logro lo obtuvo a la edad de 17 años cuando se impuso, con nuevo record mundial para la categoría, en el Octatlón del Campeonato Mundial para atletas menores de 18 años. Luego ganó plata en el Campeonato Mundial para menores de 20 años (sólo tenía 18) y el 2007 marcó su explosión al máximo nivel, pues a pesar de contar con 19 años, terminó 6º en los Mundiales de Atletismo de Osaka, y estampó nuevo registro para Cuba en la categoría de mayores, además de nueva cota juvenil para CAC. Su puntaje de 8257 unidades es la segunda mejor de todos los tiempos para un atleta en esa categoría.

Pero en 2008 ha surgido un nuevo integrante en este asalto del Caribe al tope mundial del Decatlón. Responde al nombre de Leonel Suárez y ha dejado atónitos con sus dos actuaciones de la temporada olímpica a todos los entendidos y amantes de las pruebas combinadas, incluyendo a quien escribe. Ya en 2007 Leonel avisó acerca de sus intenciones, pero luego, cuando fue confrontado con la elite continental de la prueba, primero en Santo Domingo (NACAC de Pruebas Combinadas) y luego en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro no rebasó la barrera de los 8000 puntos. Parecía que su registro era uno más de los fenomenales performances alcanzados en la oriental ciudad de Santiago de Cuba, sede cada año del Campeonato Nacional de Pruebas Combinadas de la mayor isla antillana.

En 2008, en cambio, hizo su debut a lo grande: asistió al principal meeting mundial de Eventos Múltiples. el Hypo-Meeting de Götzis, ciudad austríaca que cada año reúne a los mejores exponentes de Decatlón y Heptatlón en el mundo y donde se han implantado varios records mundiales y decenas de records nacionales.

Allí tuvo un buen desempeño en el primer día, finalizando en 9º puesto con 4162 unidades, su mejor total luego de las cinco primeras pruebas. Los registros que propiciaron este total fueron: 11.23 en 100 metros, 7.23 en salto de longitud, 13.89 (PB) en impulsión de la bala, 2.09 en altura (uno de sus mejores eventos) y 48.37 en 400.

Pero lo que hizo en el segundo día fue lo que sorprendió a todos, pues arribó cuarto tras los 10 eventos, superó el récord nacional de Yordanis y totalizó 8366, gracias a un esfuerzo de 4204 unidades en los cinco eventos finales, con marca personal en 4 de ellos: 110m con vallas en 14.42 (PB), 44.67 (PB) en disco, 4.60 (PB) en salto con pértiga, 70.67 en jabalina y 4:16.70 (PB) en 1500.

Tras el salto con pértiga marchaba décimo con 6633 unidades y su final fue tan espectacular que logró ascender 6 puestos para ubicarse en la cuarta posición y superar, por primera vez en su carrera, al jamaicano Maurice Smith, quien lo aventajaba por 361 puntos tras ocho eventos y al final sucumbió ante el empuje de Leonel por diferencia de 34 unidades.

El fin de semana del 21-22 de junio, en la ciudad alemana de Ratingen, cerca de Düsseldorf, se celebró una nueva etapa del Challenge de Pruebas Combinadas de IAAF. Y Leonel alineó en esta competencia, junto a todo lo que vale y brilla de las combinadas en Alemania. Los alemanes tendrían esta competencia como eliminación para Beijing por lo que estaban todos en plenitud de condiciones físicas.

Desde el primer momento fue evidente que Leonel estaba picando alto. Terminó el primer día en segundo sitio, con nuevo registro personal de 4243, apuntando amenazador, otra vez, al record de Cuba. Sus parciales fueron: 11.14 (PB) en 100, 7.23 en longitd, 13.78 en bala, 2.14 en altura y 48.30 (PB) en 400m.

Abrió el segundo día con otro primado personal: 14.12 en 110m con vallas. Luego lanzó el disco hasta 42.25, para asegurar el récord con su cuarta marca personal de la competencia, 4.80 en el salto con pértiga. Esta fue la clave de su éxito, pues le agregó 20 centímetros a su anterior registro, 4.60 logrado en Götzis. Al término de 8 eventos sumaba 6761 puntos, 128 más que en Götzis. Y venía entonces su fuerte: el remate final.

Registros magníficos (aunque inferiores a los de Götzis) de 69.96 en jabalina y 4:21.54 en 1500 aseguraron para Leonel un nuevo record de Cuba y la posibilidad de seguir soñando. 8451 puntos representa el tercer mejor registro de la temporada 2008 en el mundo y supera lo realizado por Maurice Smith una semana antes en Kladno.

En tan sólo dos años el Caribe ha pasado de ser cenicienta y simple espectadora en Decatlón a estar entre los primeros planos mundiales de la especialidad.

Sus exponentes, encabezados por Maurice Smith de Jamaica, están haciendo pensar a los otrora líderes mundiales de Europa y Estados Unidos, que tal vez el equilibrio se esté rompiendo a favor de nuevos atletas, que hasta hace poco nadie tenía en cuenta.

Para Maurice todo depende de que su jabalina retome alto vuelo y aterrice más allá de los 60 metros, como hiciera en 2002 cuando se adueñó de su primer récord de Jamaica: 62.07 en lanzamiento de la jabalina.

A los muy jóvenes Yordanis García (20 años) y Leonel Suárez (21) se les abre un porvenir luminoso, gracias a su gran talento y su empuje juvenil. Entre ellos dos, y otros tres cubanos que están cerca o sobre 8000 puntos, el futuro cercano de este evento parece asegurado para el gran caimán caribeño.

Nuevas caras han llegado al mundo de las combinadas. Y están pidiendo permiso para quedarse allí por muchos años.

A pesar de que la historia siempre le sonrió a Decatletas de Europa o Norteamérica, la era del Caribe se está acercando.